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Institucional

El CD Tenerife otorga a Toño Hernández el distintivo de "Leyenda Blanquiazul"

Toño Hernández, el segundo futbolista con más partidos en competiciones nacionales e internacionales en la historia del CD Tenerife, con 385 encuentros, ha recibido este jueves la escultura acreditativa como ‘Leyenda blanquiazul’, de manos del presidente

Más que un jugador, Antonio Hernández Hernández (Las Palmas de Gran Canaria, 14 de agosto de 1962) fue un símbolo y representó durante años la milagrosa transformación del CD Tenerife. De las 'catacumbas' al 'glamour', pudo disfrutar también del oropel de la Primera División y de la Copa de la UEFA. Militó 13 temporadas como blanquiazul y lo hizo en Segunda B, Segunda, Primera y la Copa de la UEFA, destacando siempre por su entrega, profesionalidad y compromiso.

Toño participó en 385 encuentros oficiales con la camiseta del CD Tenerife entre partidos de Liga (en tres categorías diferentes), Copa del Rey, Copa de la Liga, Copa de la UEFA o las históricas promociones ante Real Betis y RC Deportivo. Solo le supera en la lista, con 413 presencias, Alberto Molina, primus inter pares de las grandes figuras del tinerfenismo.

Debutó con 20 años ante la Cultural Leonesa en el Antonio Amilivia, pero vivió como suplente el ascenso a Segunda en 1983, con José Ramón Fuertes en el banquillo. A partir de ahí, siempre fue protagonista en las grandes gestas blanquiazules: en el ascenso a la categoría de plata, con Martín Marrero en el banquillo; en el salto a la Primera División, con Benito Joanet como técnico; en la agónica permanencia ante el Dépor en Riazor; en la primera liga que se dejó el Real Madrid en Tenerife; en la clasificación para la Copa de la UEFA y en el debut europeo ante el Auxerre.

No es casualidad. Durante nueve temporadas consecutivas, Toño empezaba los cursos como suplente... y los acababa como titular indiscutible y jugando al menos 30 partidos ligueros. Participó como titular en el ascenso a la élite y tras el ascenso a la élite, solo se perdió tres partidos en tres años, aunque no disipó dudas.

Toño no solo tuvo que luchar contra los rivales, también debió hacerlo contra los prejuicios. Y siempre ganó esas batallas. Y una de las razones era que tenía más virtudes de las que se le reconocían. Así, era un futbolista técnicamente correcto, aplicado en la marca, rápido, resistente, que jugaba con un alto grado de concentración, conocía el oficio, dominaba el juego aéreo en ambas áreas, poseía un buen disparo y un notable remate de cabeza…

Así fue en la élite con técnicos tan dispares como Miera, Azkargorta, Solari o Valdano. Le buscaban sustituto... pero jugaba Toño. Hasta que en la temporada 94-95, Vicente Cantatore ya no le dio ni una oportunidad. Ni en Liga, ni en Copa. Fue en el último partido de Liga, con todo ya decidido y en un compromiso intrascendente (no fue titular). Le hizo jugar 21 minutos. Al día siguiente, el 19 de junio de 1995, se fue al Granada.

Toño volvería más adelante al club, desempañando distintos papeles. Ha sido segundo entrenador, primer entrenador interino, ha ocupado cargos en el organigrama de la base, delegado del primer equipo y en la actualidad trabaja en la dirección deportiva. Hoy, más de 39 años después de su debut, sigue dando lo máximo por el CD Tenerife, con la misma humildad, entrega y compromiso de los que siempre hizo gala.

#LeyendaCDT