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Institucional

Fallece Ángel Alemán, jugador del CD Tenerife en los años cincuenta

Futbolista surgido del barrio capitalino del Toscal, formó como blanquiazul en 29 partidos, todavía en la época en la que no se permitían cambios.Este domingo, los jugadores blanquiazules portarán luto y antes de comenzar el encuentro #TenerifeFuenla, se

El CD Tenerife se ha unido este sábado al pesar por la muerte de Ángel Alemán Pérez (Santa Cruz de Tenerife, 2 de octubre de 1936), jugador de la plantilla del representativo durante las temporadas 56/57, 57/58, 59/60 y 60/61, en las que se alineó en 29 partidos. Nacido en la calle San Miguel del barrio capitalino del Toscal, hizo también carrera en el fútbol peninsular en el Extremadura, Linense, Ceuta y CD Numancia.

Volante defensivo con mucha presencia física, Alemán llegó al CD Tenerife en el verano de 1956 procedente del Güímar y tras formarse en el Leones, Cruz Verde y Almirante y debutar como regional con el Atlético Paso. De la mano de Diego Lozano, entrenador y jugador tinerfeñista en su cuarta comparecencia en la Segunda División, el futbolista toscalero disputó 25 de los 32 partidos de una liga complicada por la crisis económica del club, que debió desprenderse de siete componentes. 

Alemán fue uno de los pocos fichajes de aquella temporada, junto al interior gomero Ramón Herrera —asimismo titular—, de un Tenerife que tiró también, todavía siendo juvenil, del lagunero Alfonso Rodríguez, Foncho, luego internacional absoluto y estrella en el FC Barcelona.

La llegada de José Espada a la dirección técnica del equipo no dio continuidad a la progresión de Alemán, inédito en el campeonato 57/58 —en una época en la que todavía no se permitían cambios en el fútbol— y obligado a perderse el siguiente para hacer el servicio militar en Melilla.

De regreso al Tenerife en el curso 59-60, solo encontró minutos con José Ignacio Urbieta: dos partidos de Liga, con empates ante Recreativo y Murcia, y una derrota copera en Ferrol. El relevo en el banquillo con Vicente Gimeno le confirmó entre los reservas, igual que en la última fase de la temporada, ya con las riendas en manos de Heriberto Herrera. La continuidad en la campaña 60/61 del Sargento de Hierro en el Heliodoro permitió el ascenso a Primera de los blanquiazules y, por el contrario, la marcha de Alemán al Extremadura, donde le reclamó su descubridor de Lozano.

Tres años después, formó parte de la recordada plantilla de CD Numancia que estuvo a punto de devolverlo a la categoría de plata. Para aquel equipo le cazó otro tinerfeño, Andrés Caramelo González, futbolista destacado del Real Unión de Tenerife durante la década de los cuarenta, y entonces técnico soriano. Un tercer chicharrero, el extremo Luis Álvarez, compuso la cuota canaria del equipo rojillo, que cayó en la promoción frente al Nástic de Tarragona. Por el camino, Alemán vio cómo su proyección no consiguió cuajar dos operaciones que le hubiesen permitido saltar a equipos de mayor fuste, como Atlético de Madrid u Osasuna, que buscaba relevo para Ignacio Zoco tras fichar por el Real Madrid.

De vuelta a la Isla, retirado del fútbol profesional y ya empleado de banca, cerró su carrera deportiva en el CD San Andrés. Con el tiempo, acabaría siendo compañero de nuevo —pero ahora de tertulias y confidencias, bajo los laureles que cubren las casetas azules anexas a la Recova santacrucera—, de Julio Alonso Arribas, Julito , máximo goleador tinerfeñista. 

Fotografía: ACAN